La Ortiga

:: De Vladispots y otras imbecilidades.

Que poner a Vladimiro en un corto (“spot” que le dicen) publicitario del gobierno fue una metida de pata, lo fue, y ha dado pie a que todos los enemigos del régimen se le tiren encima. Claro, la mayoría de los mentados enemigos son los comunistas de siempre, disfrazados con las caretas estúpidas de los oenegientos, los suteperos, los cegeteperos, los humalientos, los etnocacerientos, los upepientos y demás coliformes fecales. Sin embargo, todos los argumentos en contra del famoso “spot” son ad hominem, esto es, que no interesa si lo expresado es verdad o no, sino que lo ha dicho el ladrónconchesumadremalditoasesinohambreadordelpueblogenocidajueputa de Montesinos. Desgraciadamente para todos esos grupetes de asaltantes, lo dicho por Vladimiro es verdad. Durante el régimen de Fujimori todos los ciudadanos peruanos de línea izquierdista, izquierdoide o izquierdizante estuvieron metidos bajo la cama y perdiendo orina. Así fue y la historia no se puede borrar. Los comunistas sólo son machos cuando andan en manada o cuando han construido sus tiránicos paraísos esclavistas. Suerte para ellos que el “glorioso” pueblo peruano esté compuesto -en su inmensa mayoría- por robots descerebrados que gritan lo que sea y destruyen lo que pueden cuando los asaltantes (“dirigentes” que les dicen) les pulsan la tecla enter. Y es que el comunista honesto no existe más. Desapareció para siempre con la vaporización de la Unión Soviética (Q.E.P.D.) y el derrumbre del muro de Berlín. Quienes aún piensan y hablan en comunista, o son idiotas (la gran mayoría del glorioso proletariado peruano) o unos grandísimos pendejos (los “pastores” de esa gloriosísima mayoría). Razón tuvo Churchill cuando dijo: “El comunismo es la filosofía del fracaso, el credo de la ignorancia y la prédica de la envidia. El defecto inherente está en la distribución igualitaria de la miseria”. Es curioso cómo los “dirigentes sindicales” anuncian que harán un paro general indefinido en el 2009. ¿Saben cuál será la situación económica y laboral en ese año? No lo saben y no les interesa saberlo. El paro por el paro. Joder por joder. El comunista desmadrado (valga la redundancia) sólo busca convertir al cuerpo sano en cadáver para poder alimentarse. Igualito que los gusanos. No pueden evitarlo. Así es su religión. Otra manifestación de estupidez elevada al paroxismo es la oposición al tradicional corso de Wong por Fiestas Patrias. ¿Quiénes se oponen? Un grupete del Club Departamental Tacna de Lima, quienes alegan que Wong es chilena. ¡Es decir! ¿Qué tienen estos? ¿Banderofilia? No. Megagonadismo, complejo de inferioridad y nada más. Cuando Tacna deje de ser el paraíso del contrabando traidor y artero, entonces podremos comenzar a hablar de heroísmo y patriotismo. Con igual criterio, si a mí mañana se me ocurre, en Arica, levantar una bandera chilena y dar vivas por Chile... ¿me meterían preso los carabineros? ¿Dejaremos de promover imbecilidades alguna vez? ¿Dejaremos de soñar con el ridículo y fantasmal “heroísmo”? Hasta más vernos.

Fuente: Andrés Bedoya Ugarteche (Correo, 17-Jul-2008)




:: De rescates y orientaciones.

No suelo estar de acuerdo con lo que escribe Nelson Manrique –me jode la caviarada–, pero debo decir que tiene razón en su artículo La navaja de Occam y el rescate de Betancourt. A los miembros de las FARC se les puede adjetivar de cualquier cosa, excepto de pelotudos.
A mí también me parece que hay algo que no encaja en toda esta aventura y me hago algunas preguntas:
¿Cómo es que la Betancourt estuvo tan mal custodiada siendo uno de los rehenes más importantes? Si las FARC están tan diezmadas y a punto de perecer, ¿cómo es que poseen helicópteros de última generación? Porque según lo que cuentan, los terroristas en tierra pensaron que se trataba de “uno de los suyos” (o por lo menos eso declararon los militares que cranearon la operación). ¿Con tres soldaditos previamente entrenados durante un par de días en actuación y teatro se pudo engañar a terroristas fogueados en la selva durante años?
Dicen que no se efectuó ni un disparo. ¿Cómo –¡en nombre de lo más sagrado de la metagalaxia!– consiguieron que terroristas armados hasta los dientes entregaran sus armas a desconocidos y entraran como corderitos en un helicóptero anónimo? ¡Es decir! ¿También les hicieron el cuento de la cascada? Las Hermanitas de la Caridad son más feroces.
Hay algo que tampoco logro percibir. Teóricamente, ¿los rehenes rescatados fueron llevados directamente hacia un avión que luego los trasladó a Bogotá? ¿De dónde partió ese avión? ¿Hizo alguna parada previa en algún hospital o en algún hotel de cinco estrellas con spa incluido? Porque, la verdad sea dicha, en su primer contacto con la civilización después de más de un lustro, los prisioneros liberados parecían gozar de una salud envidiable, amén de excelentes trabajos de peluquería y cosmetología. La selva colombiana debe ser el paraíso terrenal del que habla la Biblia. Betancourt, después de más de seis años de dormir encadenada y soportando insectos y bichos que le caminaban por la cara (ella misma lo ha declarado), y obligada a caminar cientos de kilómetros arrastrando esas mismas cadenas (*), no lucía ni siquiera la picadura de un zancudo. Y no hablemos de su bellísima dentadura. Si en más de seis años –a sus más de 45 de edad– no ha perdido ni un solo diente (o que por lo menos se le haya picado un poco), eso indica que las FARC deben tener toda una clínica odontológica en plena selva. La hermana de mi esposa viajó por dos días a Puerto Maldonado en plan turístico. Durante dos días fue el desayuno, almuerzo y cena de miríadas de insectos. Cuando volvió, parecía una leprosa de película bíblica. La Betancourt debería pasarnos el dato de los repelentes que utilizó en los últimos seis años. No quiero desmerecer la labor del gobierno de Uribe y su ejército, pero... ¿Ni siquiera un buen bronceado solar en ninguno de los prisioneros? Alguno, por lo menos, debía cojear un poco. Nada. Salud perfecta. Con campamentos terroristas así... ¿quién necesita de EsSalud?
Bueno, y a otra cosa, mariposa: si un país necesita ser “orientado” por esa repugnante abominación con cerebro de protozoario llamada “evo”, ese país ya está perdido. Hasta más vernos.
(*) Un militar colombiano exhibió las cadenas y candados utilizados en la Betancourt. ¡Es decir! Chillan chillan, recién saliditos de la ferretería. Ni una sola molécula de óxido, musgo, hongos u otras adherencias. Debe haber sido material importado.

Fuente: Andrés Bedoya Ugarteche (Correo, 10-Jul-2008)




:: Megaorquidia y tornillofilia.

En cuanto al título de esta nota, ocurre que la Dirección no me permite poner lisuras en el titular. Y es que debo mencionar la huevonería y el rosquetismo que los peruanos siempre exhibimos. De allí que nuestros gobernantes también lo padezcan (paralelamente a la sempiterna pendejada o “viveza criolla” que les permite llenar sus propias alforjas y que nada tiene que ver con la cobardía y la imbecilidad). Por ejemplo, mi chochera favorita, Joselo “Ardilla” García Belaunde. Si bien se está moviendo bien con lo de las leyes de “retorno” de los peruanos residentes en Europa, no sé qué le pasa con mi otra chochera, el metrosexual García Sayán. ¿Lo recuerdan? ¿El que se mandó a la China en una misión oficial cargando a su hembrita... con el dinero de todos los peruanos? Ahora lo quiere enviar como magistrado a la Corte Penal Internacional. Este señor debería ser despedido de una buena vez. ¿Es que “Ardilla” no se ha dado cuenta aún del daño que este comunista –mimetizado con el entorno caviar– ha causado al Perú? Si le tiene tanto miedo, que lo destaque como agregado militar en Andorra o en San Marino, con un sueldito de unos mil quinientos soles. No vale más. Para lo que hace ahora... ¿O será que lo ama con férvida pasión? Cómo será pues. Además, no se necesita ser un Einstein para darse cuenta de que esa “Corte” terminará siendo –más a la corta que a la larga– otro refugio, otra madriguera, otra guarida, otro antro, otra “tapa” del comunismo internacional, ya descartado del planeta por la inteligencia planetaria. Los sempiternos supositorios marxistas no descansan. Con tanta macroorquidia y tanta tornillofilia, ¿cómo sugerirle lo que el instinto y la inteligencia aconsejan, como es salirse de una buena vez de la “tapa” de San José y de ese monstruo de Frankenstein que es la Corte Penal Internacional? Que se compre un buen par de jolines de Bush. Los Estados Unidos fueron tajantes: “No nos adheriremos a la Corte Penal Internacional ni permitiremos que un solo norteamericano sea juzgado por ella”. Decisiones, compadre, decisiones. Esos guariques no sirven para nada bueno. Otro caso de huevonismo que me ha divertido mucho ha sido el interrogatorio a Vladimiro Montesinos por el fiscal Peláez. Ya me estaba aburriendo el culebrón “Los Hijos de MacTudela”. ¡La pucha! Vladimiro se lo paseó “como juega el gato maula con el mísero ratón”. ¡Pobre Peláez! ¿Es que nunca ha visto la serie Shark en el cable? El abogado allí aplica un principio indiscutible en los interrogatorios forenses: nunca hagas una pregunta cuya respuesta no conozcas de antemano. Y mucho más si encima te quieres lucir ante cámaras. Y para remate, en posteriores declaraciones a la prensa estuvo totalmente a la defensiva. ¡Vergüenza! Como dirían los ingleses, poor fellow! Bueno, ya seguiremos con más huevadas en próximas notas. No hay forma de evitarlas en esta caricatura de república.
Hasta más vernos.

Fuente: Andrés Bedoya Ugarteche (Correo, 03-Jul-2008)




:: Sobre desmadrados y proterrucos.

Ahora resulta que los policías son unos cobardes incapaces de mantener el orden, por lo del “Moqueguazo”, en donde un general de la PNP “se rindió” ante una maloliente y sanguinaria turba de subnormales que ni siquiera sabían por qué protestaban. Como buena manada de fieras, simplemente siguieron las órdenes de sus domadores, los dirigentes criptoterroristas de siempre.
En el tristemente célebre “Arequipazo” y en la toma de la embajada del Japón ocurrió exactamente lo contrario. Las fuerzas del orden se impusieron ante la hijodeputidez comunista. Entonces, quienes impusieron el orden fueron acusados de asesinos y muchos de ellos están presos y enjuiciados.
Las acusaciones de los tres casos mencionados en los párrafos anteriores –absolutamente contradictorios– fueron hechas por esos gusarapos y coliformes fecales que infestaron e infestan a la famosa Comisión de la Verdad y a esa otra cosa llamada Aprodeh, a la que nuestro bienamado Juan Luis Cardenal Cipriani llamó “una cojudez”. Se quedó corto. Para mí, esa “tapa” de filoterrucos no es más que una buena mierda, aun cuando albergue a uno que otro personaje decente aunque totalmente despistado y cojudeado. Y prefiero no mencionar a esa cloaca gigante conocida como Corte Interamericana de Derechos Humanos y de la que somos parte gracias al malhadado “gobierno de transición”, todos de cuyos miembros SÍ deberían estar presos. Gracias a ese “gobierno”, Sendero y el MRTA se están reactivando.
Y el Gran Pozo Séptico, el “parlamento”, bien podría comenzar por meterse la lengua al culo. Gracias a su inmensa mayoría de sabandijas y sanguijuelas, se ha derogado un decreto supremo que permitía a los policías y militares hacer uso de sus armas. ¡Es decir! Desarman a las fuerzas del orden y después las joden por no poder imponerse. Eso sólo pasa en este inmenso botadero mal llamado “país”.
No es de extrañar, entonces, que Aprodeh haya “producido” un par de soldaditos que estuvieron en la toma de la embajada japonesa y que “vieron” cómo sus compañeros de armas liquidaron al hijo de perra de “Tito” cuando ya se había rendido. No se necesita ser un Freud ni un Jung ni un Adler para darse cuenta de que ese par de cobardes mintieron como cocineras. Probablemente sus falsedades serán recompensadas por Aprodeh. Después de todo, se necesitan verdaderas pruebas –y no tienen una sola– para condenar al gran enemigo del terrorismo, Alberto Fujimori. ¿Será coincidencia que en esos mismos días los terroristas presos chantajean a los soldados y policías, también prisioneros por haber contribuido a liquidar al terror? Y como cereza sobre la torta, mi amiga Cecilia Valenzuela entrevista al Tapia ese, comunista proterruco y dirigente de esa buena mierda, la Comisión de la Verdad. El pata también ha criticado a la Policía. ¡Qué tal concha! Me habría gustado verlo ahí, con lo “macho” que es en la defensa del terror. Si me dicen que ni siquiera lo aceptaron como socio en el Club Revólver por rosquete. Cada vez que veía una escopeta se orinaba en los pantalones.
Hasta más vernos.

Fuente: Andrés Bedoya Ugarteche (Correo, 26-Jun-2008)




:: De desmadrados y fulbo.

Mi querido Alanito, no des tu brazo a torcer. Envía a prisión –con cadena perpetua y sin juicio previo– a todo aquel desmadrado infeliz que se atreva a mencionar la frase “Constitución del setentinueve”, particularmente si quienes lo hacen son miembros del pobrediablismo comunista, socialista, “progresista”, y en especial la excreta nacionalista-resentidista-humierdista-rencorosista-izquierdocomunista-etnocacerista-chovinista-racista-serranista-anticostista, representada por un impresentable comandantucho retirado que no es más que un monumento a la vulgaridad y a la carencia absoluta de cerebro, fruto de un error evolutivo. Milico al fín, casta de derrotados (excepción hecha de aquellos valientes que vaporizaron a Sendero y al MRTA y que ahora son víctimas del excremento oenegiento).
Yo quisiera que alguno de esos gusarapos que infestan la plaza Bolívar me dé un solo ejemplo de algún país que haya prosperado bajo la filosofía marxista. Uno solo. No los hay. Ese horrendo experimento sólo sirvió para crear inmensas colonias penales y haciendas de esclavos, en donde lo que mejor funcionaba era el pelotón de fusilamiento (Recuérdese que hasta el momento, los cadáveres producidos por el comunismo sobrepasan los 100 millones).
Lo que me recuerda que, aparte de la hacienda propiedad del hermafrodita Raúl Castro llamada Cuba, Argentina también está celebrando –bueno, qué podía esperarse de la damiselita de la Casa Rosada– los 80 años del nacimiento del sanguinario y cobarde asesino llamado Ernesto Guevara. Ese mismo, el que despreciaba a los cubanos llamándolos “cubiches”, el que en su “diario” se refería a los bolivianos como “animalitos”. Ese mismo, el que para matar a sus l,058 víctimas las tenía maniatadas y les disparaba por la espalda. Ese mismo. Esa inmencionable basura –que jamás se bañaba y murió gimoteando por su pellejo– ya habría cumplido ochenta años... si las balas no se le hubieran adelantado a la sífilis. Y a otra cosa mariposa. Hace algunos años escribí un artículo titulado “Los parapléjicos de Oblitas”. Ahora podría referirme a los “cuadrapléjicos de Chemo”. Desde entonces hasta hoy, nada ha cambiado. No, miento. Si ha habido cambios. El fútbol de este país está peor que nunca... y así y todo, miríadas de imbéciles (“aficionados” que les dicen) siguen repletando los estadios y siguen haciendo barra por las 22 malaguas antropomórficas que insisten en seguir haciendo el ridículo. Sigo insistiendo: convéncete, peruanito, que esos once paralíticos y alcohólicos, nunca jamás (repito, “nunca jamás”) clasificarán para un mundial, pues lo único que hacen -y harán por siempre- es remedar a los verdaderos profesionales haciendo una suerte de danza macabra a la que llaman “fúlbo”. No sé que espera la FIFA para expulsar al Perú de su organización. Después de todo, esa hipermafia no puede afiliar a países en los que no se juega al fútbol. Pero que esto no sea motivo de preocupación. Siempre podremos jugar a las bochas... y chupar cerveza a la vez sin problemas. En los mundiales de bochas no hay pruebas de “antidoping”.
Hasta más vernos.
NOTA: Debo corregir a mi Director. El nombre científico del “Congresaurio” no es Parlamentarius demagogis, sino Teratopitecus poliráptor.

Fuente: Andrés Bedoya Ugarteche (Correo, 19-Jun-2008)




:: El eterno callejón sin salida.

Nuestra economía está boyante... dicen. Bueno, es un buen momento, pero –se los puedo asegurar– pasajero.
Quienes me leen con frecuencia saben que yo no creo en el futuro del Perú. Creo que el Perú y los peruanos estamos condenados a la extinción, probablemente vía yugoslavización o repartija entre nuestros vecinos. Al final, nadie en el planeta sabrá que este país alguna vez existió, salvo uno que otro erudito. Y dentro de algunos siglos, este territorio será visitado por turistas despistados, como los que ahora visitan Rapa Nui. Sólo que aquí encontrarán mayor número de moais, cantidades industriales de plazas, placitas y plazoletas full monumentos (¿Sabían ustedes que sólo en Lima hay más de 75 calles, avenidas y plazas llamadas Bolognesi?).
Algunos amigos se burlaban de mí: “¿y? ¿Qué dices ahora? Estamos progresando y nada nos detiene”. Mi respuesta era siempre la misma: “nosotros mismos vamos a involucionar. Espérate nomás”.
No hemos tenido que esperar mucho para notar las nuevas e inevitables metidas de pata. Algunos ejemplos al mejor estilo aprista (Y es que no pueden evitarlo): UNO: El Banco de Materiales “perdonó” las deudas de los prestatarios morosos, porque “eran muy pobres”. En otras palabras, los préstamos fueron absolutamente inútiles, como inútil es el Banmat. Quienes sí cumplieron, reclamaron: “Entonces, devuélvannos a nosotros lo que pagamos”. ¡Manan! Respondió el Estado, y ahí quedó la cosa. El Banco de Materiales, otra fábrica de tramposos, otra universidad de adoctrinamiento en el “perro muerto”.
DOS: En televisión, en el programa de Jaime de Althaus, se presentaron dos congresistas, Velásquez Quesquén y Raúl Castro. El primero defendió la libertad de votar o no en las elecciones, y el segundo se emperrechinó en que el voto debía ser obligatorio, “pero sólo por el momento”. La idea de este sujeto es que el voto debe ser obligatorio “hasta que consigamos educar al pueblo peruano, porque en este momento casi nadie iría a votar y luego reclamarían que el gobierno elegido no tendría legitimidad”. En algo tiene razón. Un pueblo “educado” jamás elegiría a un Raúl Castro como congresista. Y dime Raulito: ¿Quién nos va a educar? ¿Tú nos vas a educar? ¡Que Dios nos proteja y la Virgen del Perpetuo Socorro nos ampare! Y otra cosita: todavía existimos muchos peruanos que no consideramos a ninguno de nuestros gobiernos –ni pasados ni futuros– como legítimos. No mientras debamos elegir de listas que más parecen galerías de delincuentes sacadas de comisarías. TRES: La magna estupidez de la “tercerización” (o como se llame) que obliga a las empresas a hacerse cargo de los beneficios sociales de las subcontratistas, si éstas no cumplen con su personal. ¡Es decir! Eso sólo podía salir del cráneo de Negreiros. ¿Se acuerdan de Negreiros? ¿Del propietario de todos los puertos del Perú en el primer gobierno de Alan cuando las empresas preferían descargar en puertos ecuatorianos y chilenos que en los peruanos que eran carísimos gracias a la “mafia negreriana”? En próximo artículo me voy a ocupar de otras lindezas, como esa protección que otorgamos a nuestros queridos terrucos en esa guarida de terroristas cobardes llamada CIDH. Hasta más vernos.
NOTA: ¡Ah sí! También de ese pobre hombre que mató a un horrible schnauser.

Fuente: Andrés Bedoya Ugarteche (Correo, 05-Jun-2008)




:: El subhumano cucufato.

Tenemos que avisar al Ministerio del Ambiente, a la Policía Forestal o a alguna ONG ambientalista. Por ahí anda suelto un sujeto llamado Renzo Paccini que está viajando por todo el Perú dictando conferencias sobre cómo prevenir el sida. Es peligroso y extremadamente ofensivo. Su última “clase” fue en la Universidad San Pablo –propiedad de los Sodalicios– en la ciudad de Arequipa, en donde se disparó a su regalado gusto con paparruchada y media. Ocurre que este pobre hombre es consultor de ese gremio de obispos que lleva el llamativo y campanudo nombre de Conferencia Episcopal Peruana y al que, afortunadamente, ya nadie hace caso. Ya podrán imaginarse el contenido de la conferencia dictada a la juventud arequipeña. Para comenzar, dijo que el condón no sirve porque tiene hasta un 15 por ciento de error (¿de qué coño está hablando?), lo que es una mentira gigante. Bueno, como buen sirviente del Vaticano, para él no es problema mentir. Su teoría es que solamente hay una forma de evitar el contagio: la abstinencia absoluta del sexo, y rezar mucho. De pronto hasta les ha sugerido autoflagelaciones al estilo de los Opus Dei. Y esto, el muy idiota, se lo dice nada menos que a la juventud. ¿No sabe este señor que el momento de mayor potencia sexual en el Homo sapiens sapiens es entre los 14 y 18 años de edad? ¿Y que eso es así porque es decisión del Tatito? ¿Y quién coño eres tú, consejerito de pacotilla, para enmendarle la plana a Dios?... Si lo hubiera, claro. Paccini, además, ha tenido la raza, el empaque y la concha, de afirmar que “el joven es un subhumano no pensante, incapaz de grandes ideales, de renunciar al placer y de pensar en el futuro”. No me explico cómo se ha salvado de ser carneado. Porque a sujetos como esos no se los lincha, se los “beneficia” en el camal más cercano. Y eso sería un pálido reflejo de lo que realmente tiene planeado para la juventud ese torquemadita de sojta categoría.
He visto la fotografía del primate que nos ocupa en la edición arequipeña de este mismo diario. No me extraña que le tenga tanta aversión al sexo. Por la pinta que tiene, un neanderthal parecería Brad Pitt. Ni la más abyecta y pobre de las callejeras tendría el estómago de acostarse con él.
¿Sabes qué, Paccinito? Reconcíliate contigo mismo. Regresa a la satisfacción sexual con el sistema de “hágalo usted mismo”. Que tu cerebro comience a funcionar sin la manivela de los curas. ¿Sabes quiénes son subhumanos? Los tetudos que creen en santísimas trinidades, en apariciones fantasmales de vírgenes, en hijos sentados sobre nubes a la diestra de sus padres, en demonios con cachos y rabo terminado en punta de flecha, en santos con caras de tetudos, en pecados originales, en concepciones inmaculadas y cosas aún más absurdas.
Afortunadamente la juventud ya no es tan tonta como lo fue hace medio siglo. Ve y dicta tus conferencias en los asilos de ancianos. Recuerda que la arteriosclerosis cerebral hace maravillas por la fe.
Hasta más vernos.

Fuente: Andrés Bedoya Ugarteche (Correo, 29-May-2008)




:: Más sobre arbolitos y Brack.

Don Antonio Brack Egg, inaugural ministro del Ambiente, se merece el mayor de mis respetos. No soy muy aficionado a la proliferación de estos nidos de burócratas y espero que sea más o menos pequeño. En todo caso está muy bien si es lo que se necesita. Como dirían los gringos, “if that’s what it takes...”. Sin embargo, debo coincidir con mi amigo y pariente Lucho Rey de Castro: ¿de qué nos sirve este ministerio si no tiene apoyo alguno? ¿Si la Policía Forestal no existe salvo para lucir sus simpáticos sombreritos en algunos desfiles? Tengo un amigo –y lo cuenta como gracia– que sale a cazar zorros y vizcachas por las serranías, con la incondicional colaboración de policías forestales, que sólo le piden un par de soles “pa la gaseosita”. ¿De qué nos sirve ese ministerio si no hay una policía honesta y valiente que haga desaparecer, de una vez y para siempre, a los millares de taladores ilegales de árboles en nuestra selva a quienes se debe tratar como a terroristas y narcotraficantes? ¿Qué ganamos con ese ministerio si no damos leyes draconianas que diezmen al Poder Judicial de su corrupta carroña? ¿Qué ganamos con ese ministerio si siguen sueltos millares de alcaldes provinciales y distritales cuyo principal hobby es talar árboles? Otro ejemplo arequipeño, con las disculpas al lector, que se debe estar repitiendo día a día a todo lo largo y ancho del territorio nacional. En el diario CORREO, edición de Arequipa, aparece el siguiente titular: “Arrancaron de raíz árboles con más de 30 años de vida”. Medio centenar de molles, cerezos, sauces, vilcos y paltos, sembrados hace más de 30 años en la alameda Cuajone del pueblo joven Cerro Verde - Uchumayo, han sido arrancados de raíz por un cargador frontal de la municipalidad para sembrar cemento y “remodelar” la mencionada alameda. ¡Es decir! Si ya la puedo ver: una “alameda” sin un solo álamo, llena de banquitos de cemento, arcos del triunfo, monumentos a la madre, estatuas de “lonccos” y cuanta huachafería pueda caber en el cerebrito del alcalducho de un insignificante distrito. Ese sujeto –conjuntamente con más del 60% de los alcaldes peruanos– debe ser llevado a la cárcel sin juicio alguno y previa evaluación de la especie a la que pertenece. No lo conozco ni lo he visto, pero si camina erguido es, sin duda, un primate con un número de neuronas que haría aparecer a un orangután como Einstein.
Además, y de eso estoy casi seguro, la tal “remodelación” valorizada en, digamos, 80 mil dólares, en realidad va a costar no más de 40 mil. ¿Dónde se va la diferencia? Pregúntale a las estrellas.
Ya es tiempo que se apruebe una ley por la cual se obligue a los alcaldes a entregar todos los serruchos, sierras, tijeras y cuanta herramienta depredadora posean. Ya estuvo bueno. Que esa gentuza –que se orina en los pantalones con los gritos de los propietarios de combis– se vaya a sus covachas, debajo de las piedras de las cuales salieron. ¡Ah sí! Y de paso, otra ley derogando la tan “democrática” que permite a los peruanos elegir a las “autoridades” que elige.
Hasta más vernos.

Fuente: Andrés Bedoya Ugarteche (Correo, 22-May-2008)




:: Gónadas, arbolitos, arroz y Agrobanco.

Mi querido Alan, no sé cuán bien puestos los lleves, pero creo que debes mencionar –de una buena vez– los nombres que el pobre diablo de esa minúscula ridiculez llamada CGTP te está exigiendo. No que interese mayormente la opinión de ese bufonesco agrupamiento de pro terrucos quemallantas, pero no hay que ser un genio para conocerlos y denunciarlos. Todos sabemos quiénes atentan contra nuestra democracia hoy en día: los desfasados comunistas (que los muy estúpidos se han rebautizado como “progresistas”), reaccionarios al sentido común. Sólo tienes que mencionar la relación de socios de las oenegés traidoras, a los humalientos, a los upepientos y demás coliformes fecales. Y también a esa tapa de cobardes infestada de terroristas sin agallas que es la Corte de San José. Fácil, compadre. Sólo se requieren cojones. Y de paso liquida de una buena vez nuestras relaciones diplomáticas con el cerdo de Caracas. ¿Y los arroceros? ¿Les vas a seguir permitiendo que concierten artificialmente sus precios cuando les venga en gana? ¿Harás ese alarde de huevonería sólo comparable a la imbecilidad de Toledo cuando su gobierno compró toda la cosecha excedente de arroz simplemente porque los jueputas esos bloquearon carreteras? Gónadas, Alanito, gónadas. Y ya que hablamos de agricultura, Alanito, ¿hasta ahora no aprendes que los bancos de fomento al “agro” no son más que alcahueterías? ¿O no has condonado deudas agrarias una y otra vez? Hemos tenido bancos agrarios, agropecuarios, agrícolas, agrobancos y cuanto hay. ¿Para qué han servido? Sólo para que los ganaderos se compren –con la plata de todos los peruanos– sus propias vacas, o se vayan a pasear a Europa o adquieran cuatro por cuatros último modelo. ¿Por qué mejor no les regalas NUESTRO dinero y nos dejamos de hipocresías?
Y ahora una anécdota de la Municipalidad Provincial de Arequipa. No que ese lugar interese mucho, pero lo que allí ocurre puede ser contagioso y repetirse en otros municipios. Un “funcionario” de ese concejo provincial, cuyo nombre no recuerdo pero que se dice “ingeniero”, ha declarado hace algunos días que tienen planeado sembrar cien mil árboles en toda la ciudad. La idea no sería mala si tuviésemos la cantidad necesaria de agua para regar las más o menos cuarenta hectáreas que ocuparían los retoños y que no la tenemos. La idea no sería mala, si tuviésemos la necesaria cantidad de alambre de púas electrificado para proteger a los árboles de los peruanos... y de las municipalidades.
Desgraciadamente, este “ingeniero” (que debe ser de sistemas o sanitario porque de forestación no sabe nada) también ha dicho que se deben talar los árboles “que malogran las veredas”. ¿Se imaginan al director de un hospital asesinando a todos los enfermos porque “malogran los colchones”? ¡Vaya! Arequipa por fin se ha ganado el Premio Nobel al cretinismo. El “ingeniero” también ha manifestado que los árboles con más de 30 años de edad deben ser destruidos. ¡Es decir! Si este señor hubiera dicho eso en Europa o en Norteamérica, ya habría sido encerrado en un zoológico, pues ni siquiera se le hubiese considerado humano. ¡En fin!, eso pasa cuando el gloriosísimo pueblo peruano elige a sus “autoridades” y éstas, a su vez, están llenas de ahijaditos, sobrinitos, queriditas y amiguitos.
Hasta más vernos.

Fuente: Andrés Bedoya Ugarteche (Correo, 15-May-2008)




:: Humaladas, Animaladas y Náuseas.

Ollanta Humala ha declarado que le “dan asco” los actuales políticos en ejercicio y el actual “sistema”. Bueno, al parecer pudo controlar muy bien sus náuseas cuando vivió dos años en Paris y uno en Seúl, en calidad de parásito del Estado peruano --y del sistema-- no haciendo absolutamente nada. Repito, ab-so-lu-ta-men-te-na-da, pero con jugosísimo sueldo. ¿De dónde tiene plata Humala? ¿Será que se ha acojido a la veinte cinco treinta o a la diecinueve nueve noventa con sus ingresos de las embajadas (en donde no hacía ab-so-lu-ta-men-te na-da)? ¿Gozará de algún otro tipo de pensión? ¿Su señora será “de tener”? No de otra manera se explica que haya adquirido un departamento de lujo en la pituquísima Playa Embajadores al sur de Lima, en donde estará rodeado de “blanquitos”. ¿Qué pasa Ollantita? ¿La hipocresía es otra de tus virtudes? ¿Hiciste la compra del depa con dinero obtenido de la explotación de las pobres masas quechuas y aymaras?. Y ahora ha saltado el “papacito” de los ollantas, antauros, ulises, cusicoyllures, imasumacs y etcéteras, con las conocidas paxchotadas de los curacas. Ha declarado que “¡por fín! Van a gobernar los de raza cobriza” (“lorchos”, que les dicen... y a MÍ me dicen racista). También ha utilizado contra Lourdes Flores el término “solterona” como despectivo, y eso se explica. Don Isaac es aborigen peruano, y como tal pertenece a una etnia que, tradicionalmente y por siglos, ha menospreciado a la mujer (Igual que el cristianismo, el judaísmo y el islam). Para ellos --y para don Isaac-- la mujer no es más que una fábrica de crías sin mayor utilidad que la de “servir” al marido, abrirse de piernas y practicar las célebres tres kaes (KKK) de los nazis: KINDER, KÜCHE, KIRCHE: niños, cocina, iglesia y nada más. Así, para el cobrizo Isaac, ser “solterona” es ser un semoviente mostrenco que no sirve para nada. En fín, cosas de los medievales. Pero se va a fregaaaaar... se va a fregaaaaar. Ahorita salta el papá de Lourdes con un “¡Isaac, auquénido de Quispicanchis!” (o de donde sea), y se arma un chongo.Otra del pobre viejo (el de Humala, no el de Lourdes): dice que Lulú es de “extrema derecha”. Sigue con la terminología de la época del caldo, de antes de la caída del muro de Berlín, de antes de la vaporización del imperio soviético, de antes que el marxismo, el leninismo, el trotskismo, el maoísmo, Pol Pot, la “Idea Suche” y el “Pensamiento Gonzalo” cayeran al basurero de la historia. Pobrecito. Nunca se ha molestado en mirar a su alrededor y ver que los únicos países que prosperan son los que aplican la economía de mercado. Los otros, los izquierdistas, se van ineluctable, inevitable e impajaritablemente a la mismísima mierda. Sin excepciones. Que recuerden los Humalas la frase célebre de Albert Einstein: El nacionalismo es el sarampión de las naciones. Sólo se da en países inmaduros”. Y eso no lo decía cualquier cojudo. Lo dijo Einstein, nada menos. Y ahora, con la inevitable globalización, la palabra “nacionalismo” está desapareciendo prácticamente de todos los diccionarios. Un amigo mío ha conversado largo y tendido con Ollanta y me dice: “su problema es el resentimiento social incurable que padece, producto de siglos de complejo de inferioridad, como muchos `cobrizos´. Además, no tiene idea de nada en lo que a gobernar se refiere, pero cuenta con tres virtudes: sabe escuchar, acepta consejos y tiene una esposa muy inteligente”. Ojalá eso sirva, pues. Y que la próxima elección de Ollanta como Primer Mandatario --y lo será, salvo error u omisión que casi nunca me ocurre-- no sea la desoladora teleología fruto de la atroz capitulación ante la estupidez que nos destruirá y que nos la hemos buscado.
Hasta más vernos.

Fuente: Andrés Bedoya Ugarteche (Correo, 05-Ene-2006)